Abril de 2020. Un mes de confinamiento y la cosa iba para largo. Ante la imposibilidad de continuar los encuentros de poesía mensuales y otras actividades en la asociación Humanista Barrio del Pilar surge la idea de una revista digital, dedicada a la poesía y a las reflexiones.
«Recital virtual para la esperanza» fue el encuentro que puso en marcha la inspiración, cuando tratábamos de conectarnos y rescatar momentos positivos en esta situación nueva y difícil. Una semana después tuvo lugar una reunión de consejo de redacción con ocho promotores iniciales: Mika (Cádiz), Fiorella (Canarias), Priscilla (Ecuador), Ed (Reino Unido), Amada, Pilar, Eva y Olga (desde Madrid).
Los aplausos a los sanitarios de las ocho de la tarde, el único momento de relación con otros vecinos a través de las ventanas nos inspira el nombre de la revista: Ventanas Abiertas.
Desde el inicio pusimos el foco en lo positivo, lo que nos inspira, lo que nos ayuda a superarnos. De este interés surgen las secciones «Noticias inspiradoras» y entrevistas a «Gente que inspira». Además de dar voz a temas sociales, de derechos humanos... ya que una cosa común de todos los participantes es la rebelión contra la deshumanización del sistema. De ahí las secciones «Voces Diversas» o «Juntos y Solidarios».
En mayo iniciamos viaje con los Diarios de cuarentena; en junio navegamos la incertidumbre de ese Tiempo entre intervalos; en julio creímos movernos Hacia una nueva normalidad y pensamos que solo era posible hacerlo juntos y solidariamente; durante agosto y septiembre exploramos Rutas internas y paisajes poéticos; para llegar a Ventanas para la paz y miradas a la no violencia en octubre; en noviembre apostamos que Cuidando el planeta, nos cuidamos todos; y concluimos 2020 conscientes de que estamos inevitablemente Interconectados; en febrero reflexionamos sobre El agua como derecho universal que no se cumple para todos; y llegamos a marzo reivindicando que, Cuando una mujer da un paso, todas y todos avanzamos; completando en abril el ciclo en una Primavera poética, que nos pudiera abrir a nuevas inspiraciones...
Se fueron sumando María Jesús y Betina, además de Sandra, Fernando, Santi, Mara..., y un gran montón de gente que ha ido apoyando de diferentes formas y desde varios países, con sus textos, dibujos, fotografías, correcciones... Amada ha ido tratando de dar espacio a los niños y niñas en su sección de «Ventanitas»...
¿Hacia dónde va este proyecto? Quizás dure solo lo que dure esta crisis… aunque, ojalá, pueda servir para fortalecer este ámbito de ayuda, aprendizaje e inspiración compartido, abierto y expansivo… y podamos inspirar a otros.